Los grandes triunfos del
Boryi y su profunda tristeza
*Ha ganado de todo como
hacedor cultural, incluyendo nueve Congos de Oro en el Carnaval
de
Barranquilla, pero el apoyo institucional es poco y como se quedó sin sede
está literalmente en la calle.
RAÚL Antonio Borja Charris, El Boryi, y sus numerosos trofeos. |
Si hay un referente de los actores
y hacedores culturales en Santo Tomás ese es Raúl Antonio Borja Charris, El
Boryi, un luchador incansable que ha dedicado la mayor parte de su vida a la
formación de niños y jóvenes en actividades como la danza y el teatro, música,
disfraces y deportes.
Ya perdió la cuenta de los
premios alcanzados, pero estima que pasan de los 250 y remarca en los nueve
Congos de Oro, el mayor galardón que sólo se le entrega a los mejores en el
Carnaval de Barranquilla.
En sus 34 años de estar haciendo
cultura no había experimentado tan hondos sentimientos encontrados, de
satisfacción por un lado y mucha tristeza por el otro. Su grupo acaba de ocupar
el segundo lugar a nivel nacional en el Concurso de Danzas llevado a cabo en
Cucaita Boyacá, y el primer lugar en el departamento del Atlántico; pero su
Fundación Artística y Cultural Boryi se encuentra literalmente en la calle.
Máscaras, instrumentos musicales y diferentes elementos de trabajo están
arrumados en su cuarto y un baño, porque se quedó sin sede.
En la siguiente entrevista
concedida a ZONA ORIENTAL, este
docente de Educación Física de la Universidad del Atlántico, habla sobre lo que
considera una situación de mendicidad en que se encuentra su organización, al
igual que de sus numerosos triunfos.
¿Cómo
le nació esta inclinación por la cultura?
En el sector donde yo vivo es
donde nace el Carnaval Intermunicipal, y yo me acercaba cuando estaba muy niño
allá; y me nació la inspiración que mientras había reinas y carrozas, no había
quien aportara un elemento importante como es el de los disfraces. Entonces fui
absorbido por la cultura en el tema concreto de los disfraces y me dediqué a
esta labor hasta el día de hoy que seguimos en esta importante actividad.
¿Muchos
premios?
Bastantes premios, hasta el
punto que hemos perdido la cuenta. Yo calculo que son unos 250 aproximadamente,
entre ellos 12 en el Carnaval de Barranquilla y de éstos 9 Congos de Oro, que
se constituye en el máximo galardón que se otorga a los mejores.
¿Cuántos
disfraces?
Se han hecho aproximadamente unos
46 disfraces, habiendo ganado en el Carnaval Intermunicipal con más de 20. En
el Carnaval de Barranquilla hemos participado en 20 oportunidades.
¿Cuáles
son los más representativos?
Uno de los
que impactó mucho fueron Los Muertos Vivientes, que creamos en 1992 en una
Noche de Guacherna en Santo Tomás. Posteriormente lo mostramos en el Reinado
Intermunicipal, luego en Barranquilla y fue la sorpresa en el Carnaval del
Sur, ganando el primer puesto. Eso me dio punto para ir con firmeza a la Vía 40
que en la actualidad es donde estoy participando.
También han
ganado Congo de Oro Los Extraterrestres, Los Síndromes de Protheus, La
Esclavitud con el que resalté el trabajo de Colombia; y Los Seres Extraños,
entre otros.
¿Cómo
ha percibido el apoyo de la institucionalidad para esta actividad que usted
adelanta?
De verdad que el apoyo ha sido
durante tanto tiempo muy poco, es muy poquito lo que nos dan; nunca hemos
tenido un patrocinio, solamente hemos tenido colaboraciones de algunas
administraciones que son las que nos han dado cualquier cosa para ayudarnos, pero
eso no es suficiente. Nosotros necesitamos más, eso no nos alcanza para lo que
estamos haciendo por nuestro pueblo.
Por ejemplo tengo que agradecerle
al alcalde actual que nos aportó 1 millón de pesos para ir al reciente evento
de Cucaita, pero necesitamos más, por ejemplo para vestuarios, instrumentos
musicales, un espacio para poder multiplicar eso.
¿Con cuántos niños y jóvenes trabaja?
Estamos con 130 aproximadamente,
distribuidos en diferentes modalidades, tales como teatro, danza, disfraces,
música y el deporte.
¿Hoy
ustedes no tienen una sede donde operar?
Realmente no
la tenemos, el año antepasado tuvimos la oportunidad de tener un espacio que
nos había cedido el Municipio, pero desafortunadamente no nos reubicaron y
todavía estamos esperando. En ese momento la señora alcaldesa nos dijo que nos
iba a reubicar y no lo han hecho; quiere decir que en este momento estamos en
la calle pasando trabajo. Estamos como unos mendigos cuando ya somos artistas
reconocidos y sin embargo no nos han prestado atención en este caso.
Cuando llegó
el “Tsunami” y nos arrastró pude recoger lo poquito que conservo en el cuarto
de privacidad, donde acomodé algunas cosas. Eso es lamentable para la cultura
de Santo Tomás, que de una u otra forma la estamos proyectando a nivel nacional
e internacional, pero con los brazos atados no es fácil continuar. Invitamos a
las administraciones y comunidad en general para que nos colabore y de esa
manera seguir fomentando el arte y la cultura en Santo Tomás.
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